martes, 24 de enero de 2012

Los glaciares españoles

Encontré un documento interesante. Analiza el estado actual de los restos glaciares españoles en el 2008 y su variación histórica desde el final de la Pequeña Edad del Hielo (primera mitad del siglo XIX). En concreto se analizan los datos de 1980/82, 1993, 2002 y 2008.

Los Pirineos albergan los únicos glaciares activos que en la actualidad persisten en la Península Ibérica. A principios del siglo XX ocupaban una superficie aproximada de 3.300 ha. y en 2008 sólo cubrían unas 390 ha. De esta extensión, aproximadamente unas 206 ha. pertenecen a la vertiente española.


Las zonas del Pirineo central español en las que todavía se mantienen glaciares activos pertenecen, de Oeste a Este, a las cuencas hidrográficas de los ríos Gállego, Cinca, Ésera-Garona y Noguera Ribagorzana. Las alturas máximas de los conjuntos montañosos que alojan los glaciares superan los 3.000 metros de altitud, pero sus diferentes formas, emplazamientos y orientaciones dan lugar a una distribución irregular del área glaciada. Eso sí, sólo el macizo de Aneto-Maladeta concentra el 56% (11 ha) de la superficie glaciar española (206 ha.)

Todos los glaciares se sitúan en emplazamientos particularmente favorables en función de su altitud (por encima de los 2.700 m), orientación (básicamente NE o NO), exposición a los vientos (al abrigo de los flujos del Oeste), etc.

Los antecedentes más lejanos de estos glaciares actuales se encuentran en las grandes glaciaciones cuaternarias que, a lo largo del Pleistoceno, afectaron a amplias zonas del planeta, incluyendo distintas áreas montañosas de la Península Ibérica. El último de estos periodos, denominado de modo general Würm, provocó en el caso de la vertiende española del Pirineo, potentes mantos de hielo que cubrieron las zonas más elevadas de la cordillera y emitieron poderosas lenguas glaciares (en algunos casos de casi 40 km de longitud, tres de anchura y más de 600 m de espesor), que confluían en los valles principales y descendían hasta los 900 metros de altitud, formando verdaderos glaciares de valle similares a los que actualmente existen en el Himalaya o Alaska.

A partir del último máximo glaciar, el clima se ha ido haciendo más cálido y las lenguas de hielo del Pirineo iniciaron un lento, pero inexorable, retroceso.


En septiembre del año 2009, el glaciar del Aneto, se ha dividido en dos glaciares que a partir de ahora seguirán una dinámica independiente, con lo cual aún será más vulnerable a los efectos del cambio climático.


Fuentes: 

1 comentario:

  1. Me gustaría llamar la atención sobre un dato curioso. Me sorprende que una institución como el Ministerio de Medio Ambiente considere que el estudio morfológico glaciar se inició en los años 70. Supongo que se referirán a los Pirineos, porque existen aportaciones anteriores sobre morfología glaciar desde Boissier o Willkomm por poner dos ejemplos destacados (sin citar a los autores prerrománticos y decimonónicos que ya contribuyen a su estudio). Citando al propio Martínez de Pisón (como lo hacen ellos), en sus trabajos señaló la influencia de los investigadores pirenaicos franceses en el estudio del aparato glaciar durante gran parte del siglo XIX. Concretamente la aportación de la escuela de Ramond de Carbonnières ya describe la expansión y formas de relieve de los glaciares pirenaicos a finales del siglo XVIII, anterior a los estudios de Schrader o Gaurier, al que hay que añadir aportaciones de Albrecht Penck. Tampoco veo conveniente centrarse sólo en los estudios de Schrader y Gaurier a la hora de analizar la morfología glaciar de los Pirineos, ya que los estudios de Hernández Pacheco o del propio Penck en mi opinión pueden aportar mejores conclusiones.

    Por lo demás, a quien le interese el estudio morfológico glaciar no sólo en los Pirineos, recomiendo los estudios recientes de González Trueba y Serrano (éstos no solamente centrados en Pirineos, sino en Picos de Europa), los estudios sobre el permafrost de Palacios en Sierra Nevada, y más generalmente, los trabajaos de Penck, Obermaier o Martínez de Pisón, trabajos que todos los que hemos estudiado esto nos suena.

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